Oliva apuesta por la sostenibilidad, la atemporalidad y el new gender para su colección crucero 2020. Con su nueva propuesta busca crear un equilibrio entre costura y creatividad. Los contrastes de Ibiza, que puede ser la isla tranquila o la de la locura, la sofisticada o la hippie, se muestran con sutileza en sus creaciones.
El creador apuesta por seguir desarrollando las líneas y patrones que le ha distinguido a lo largo de su carrera en una colección pensada para disfrutar, unida a un concepto vacacional relajado e informal. Sus trajes de noche se vuelven muy ligeros, sin apenas costuras, y se combinan con leggings de vinilo, sandalias Birkenstock e incluso botas Hunter, dando un toque desenfadado y juvenil a sus looks.
Blanco, negro y rojo son el hilo conductor de la propuesta crucero de Oliva, en la que también hay cabida para destellos dorados, lentejuelas y aplicaciones de plumas. Sus diseños se confeccionan en tejidos naturales como el lino, pero también en telas PET, apostando nuevamente por la sostenibilidad y el reciclaje de fibras.