"Pertenecemos a dos generaciones muy diferentes de la moda española y, quizás por eso, tuvimos muy pocas oportunidades de compartir nuestras opiniones sobre nuestra profesión y el reto de ejercerla en nuestro país, pero salvada esta distancia natural, la persona y la obra de David Delfín siempre me parecieron extraordinarias. Era un joven muy valiente, capaz de recordarnos lo valientes que hemos sido todos los jóvenes…, y muy brillante, algo ya más raro en nuestra profesión y en cualquier otra.
David Delfín tenía un talento innato para todas las cosas que hacía, fuese bailar o pinchar música, diseñar una colección o soñar una puesta en escena. Escribir, dibujar, coser o cantar…, todo lo que hacía sabía hacerlo muy bien. Siento una enorme pena por su pérdida, pues creo que era el ejemplo perfecto del “superviviente”…, un tipo de héroe tan necesario como escaso en nuestra profesión. En los quince años que nos acompañó supo demostrar por qué era el mejor de su generación. El Premio Nacional de Moda quiso reconocérselo en el momento más duro de su vida, cuando tanto él como su inseparable Bimba sabían que la vida es bella pero muy corta. Descanse en paz. Nos queda su memoria".
Roberto Verino